domingo

Intento de Gofres 1ª Parte

Me he vuelto adicta a los cacharros de cocina, moldes, utensilios, etc…da igual si tengo alguno parecido, el tema es, que cuando los descubro, me da la fiebre y pienso que le voy a dar todo tipo de utilidades, nada más lejos de la realidad, al final, casi todos acaban igual, en el cajón del olvido.

Es una emoción indescriptible la que se siente cuando adquieres un “cacharro” nuevo, desde que lo metes en la cesta de la compra hasta que llegas a casa, te invade esa emoción que sólo los niños el día de reyes son capaces de experimentar, nervios, emoción y la promesa interna de que le vas a sacar partido y aunque sea una o dos veces al mes harás uso de él. Promesas y sólo promesas, lo cierto es, que lo usas el primer día y como en un principio los resultados obtenidos no sean los que habías imaginado… repentinamente te entra una amnesia selectiva y te olvidas del aparato en cuestión durante los seis meses siguientes.

Esta vez ha sido La Gofrera, que a fin de cuentas no deja de ser una “sandwichera” pero con unas paredes internas distintas, que le confieren a la masa en cuestión, las marcas distintivas de éste empalagoso dulce.

Ingredientes:
1 huevo
2 yemas
350gr margarina
350gr azúcar
500gr harina
1 vaso de leche
8gr de levadura de panadería
1 cucharilla de esencia de vainilla

Preparación:
Se hace la masa con todos los ingredientes. Hacemos bolas de masa del tamaño de una bola de billar, las ponemos en una placa, dejando una pequeña separación entre las bolas y se dejan reposar cuatro horas para que leude. Se engrasa la gofrera con aceite (se usa una brocha), se deja calentar 5 miutos (o el tiempo que te ponga la máquina). Con una espátula, se coge una bola , se pone en la gofrera y se estira un poco, sin salir del molde. Se cocinan hasta que estén doraditos. Como salen bastantes, se pueden congelar, tanto los gofres ya cocinados (cuando se quieren consumir se calientan 2 minutos en el microondas) como las bolas, sin leudar (se congelan en la placa cuando se quieren cocinar, se sacan 8 horas antes, para que descongele y leude)

Las bolas ya formadas:

El resultado es una masa muy manejable con un cierto parecido a la plastilina.

Después de pasarlos por la gofrera (son pequeñitos), para mi gusto, han resultado quizás un poco “bastos”, quizás sea por la harina de más que tuve que añadirle, ya que con la cantidad de mantequilla que indica la receta, la masa quedó en un principio demasiado líquida, pero bueno, nada que con un buen sirope de chocolate no pudiéramos arreglar ;)


1 comentario:

  1. ¡Que ricos!
    Me copio la receta y a ver que tal porque quiero probar distintas recetas.
    Acabo de hacer la de este blog:
    http://www.blogseitb.com/recetasdecocina/2011/09/26/gofres-belgas/
    Riquísimos, saben como los comprados y cuando lo haces es una masa no líquida pero si muy pastosa que se pega a todo y sin cuerpo. Con una cuchara se echa la masa en la gofrera y estaban de-li-ci-o-sos.
    Tenía en casa la gofrera desde hace casi 10 años y ahora que a mis niños les gusta me he puesto con los gofres.
    Saludos.

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